El Lic "Oyente de Disidente"

Por Lucy Ramón.

Si el Lic "Oyente de Disidente", José Alberto Botell Cárdenas, no se hubiera puesto farruco y no le hubiera partido pa'rriba a la Estrella Huelguista, todavía las dudas y especulaciones estarían dándonos vueltas en las cabezas. Pero la Ley Divina no quiere trampas y coloca a las personas en el lugar que les corresponden, aún cuando la violencia, se haga presente como acelerador de los resultados. 

Todos los que venimos siguiendo la noticia, vimos la copia del documento emitido por la sección de intereses de los EEUU en La Habana, correspondiente al departamento de Refugiados, donde se detalla una lista de solicitudes de visas denegadas a merced del criterio de un líder opositor cubano residente en Cuba.

Y me pregunto:

- ¿Desde cuándo el criterio de un opositor incide o determina la opinión de un funcionario de inmigración de los EEUU?

- ¿Acaso es un nuevo procedimiento establecido para el programa de Refugiados o existe algún negocio ilícito entre lideres opositores y funcionarios? 

Cada vez cae más lodo sobre nuestra lucha, cada vez aumentan la decepción y la apatía de los que quizás estén, verdaderamente dispuestos a enfrentar al régimen pero, al ver tanta basura humana, prefieren mantenerse bien lejos. Sucede con la oposición, lo mismo que con la religión, adonde vemos religiosos que dicen ser servidores de Dios y son peores que los ateos y que el peor de los delincuentes y pecadores.

Con razón Wallesa se cansó de nosotros y se apartó de los asuntos cubanos. Los que si no podemos darnos el lujo de cansarnos somos nosotros porque, la libertad de Cuba no depende de turisdisidentes, ni de falsos huelguistas ni de compradores de visas, ni de ningún descarado e inmoral que ha convertido la lucha en su estilo de vida.

Después de todo, ¡no hay mal que por bien no venga!. Estos escándalos han servido para quitarles las caretas a unos cuantos caradecoco que dañan los sacrificios de los genuinos luchadores. Esperemos que se retiren de la oposición o aquellos que los siguieron hasta hoy, les huyan como el diablo a la cruz; la purificación de las filas opositoras, más que una vergüenza, son un paso de avance en la lucha por la libertad de Cuba.

Bye, bye Coco...