Por Lucy Ramón.
Desde ayer,el régimen castrista comenzó a tocar una nueva música para ponernos a bailar a su antojo porque así somos de simples. Basta que desde allá lancen un tema a la palestra publica para que todos acá, comencemos a escarbarlo,a comentarlo hasta agotarlo.
Fíjense que nos calculan nuestros grados de emociones, de apasionamientos. Los cerebros macabros de la inteligencia cubana saben que la muerte de algún preso político, las golpizas y otros sucesos relevantes, nos mantendrán rabiando un par de meses y después ,se nos pasa como a la rana Rene'. Al paso de los días, la euforia y los gritos van apaciguándose hasta que regresa la calma. No pasa nada, no hay castigo para el tirano y la gente comienza a decepcionarse y a alejarse de la temática cubana hasta que acontezca algo nuevo.
¡Caramba!¿Hasta cuándo vamos a seguirle la rima a esos atorrantes?.
Ahora nos han "traído un tete nuevo":
El regreso de Elian. Esta nueva puesta en escena nos mantendrá entretenidos, fajados entre nosotros mismos hasta que por allá terminen de COCINAR ALGO QUE TRATAN DE OCULTAR y nosotros acá en la bobería de Elian, la novia y la cara de idiota del padre.
¡Abran los ojos hermanos!. A Venezuela la están midiendo y no es precisamente para nada bueno. Los sirvientes del régimen nos están ganando terreno, montando su estocada final, aquella de la que les vengo advirtiendo hace unos años.
Busquen a los REMENDONES CASTRISTAS, al Cuesta Morua y sus colaboradores que se están dando banquete montando la Traidora unidad en la diversidad socialista, mientras nosotros estamos embobecidos con el tete de Elian. No se quejen.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario