Por Lucy Ramón.
Llevamos tiempo queriendo que el presidente de USA nos escuche. Llevamos meses quejándonos y protestando por el establecimiento de las relaciones entre EEUU y el régimen castrista. Nos angustiamos cuando vemos que las conversaciones apuntan a que de un momento a otro, se anuncie oficialmente que esta administración y los hermanos Castro lograron llegar a un entendimiento.
Mientras en este Miami controversial no dormimos pensando en la tragedia que les espera a nuestros hermanos en la isla, partir de que esta "amistad" se haga realidad. ¿Qué creen que está sucediendo allá? Allá, en la isla, esos hermanos nuestros nos maldicen y nos culpan de sus miserias y de estar entorpeciendo la posibilidad de reanudar las relaciones entre el Yuma y Cuba.
¡Así como lo oyen!
Resulta que por culpa de los "viejos intransigentes de Miami", es que no acaban de resolver su situación.
Porqué está sucediendo esto, cuando nosotros hasta dejamos de trabajar y de descansar participando en protestas y en reuniones, tratando de decirle al señor Obama que, le exija a Raúl Castro la libertad de los presos políticos que esconde en las cárceles cubanas, tratando de que vea cómo esa dictadura continúa golpeando, persiguiendo y encarcelando a los cubanos que denuncian las violaciones a los derechos humanos. Estamos insistiendo en que nuestros hermanos no sean convertidos en esclavos modernos.
Sepan mis queridos compatriotas que el régimen se ha encargado de llevar una campaña mediática contra nosotros para ocultarle al pueblo sus verdaderas intenciones. En estos momentos el que Obama nos escuche, sería un milagro, así que es nuestro deber de cubano llevar a la isla la otra cara de realidad.
Y si vas a Cuba, quiero que les recuerdes a nuestros hermanos las palabras del Apóstol que hoy, desgraciadamente vuelven a tener vigencia:
..."de impedir a tiempo con la independencia de Cuba que se extiendan por las Antillas los Estados Unidos y caigan, con esa fuerza más, sobre nuestras tierras de América. Cuanto hice hasta hoy y haré es para eso...."
Los inversionistas americanos llevarían empleos, abrirían industrias, fábricas, negocios, eso es cierto pero también es cierto que, a parte de continuar esclavizados, sus desgracias aumentarán, detalle con el que nada tienen que ver esos señores, ni les importa.
Los negocios de los cubanos de la isla serían asfixiados por esos inversores, debido a la desigualdad de garantías y condiciones y encima de eso, el régimen enmendó una vez más su blindada constitución, estableciendo que, por cada dólar que esas compañías extranjeras paguen al empleado, se quedará con el 92%,es decir, el obrero sólo recibirá en bruto 0.08 centavos de los cuales, se les descontara un % para seguros de compensación y otro % para su jubilación y programas sociales.
¿Con cuánto se quedará en su bolsillo un obrero cubano? CON UNA MISERIA.
¿Por qué creen que el Cardenal-Diablo dijo que en Cuba no habían presos políticos?
Porque ese régimen maldito lleva tiempo maquillando su dictadura para congraciarse con el Imperio. Así que, si logran amigarse, se acabaron las protestas porque se sobreentiende que ya son libres y es entonces cuando las pocas voces que se alzan serán acalladas y la Bestia podrá masacrarlos contando con el beneplácito de esos poderosos.
Y si vas a Cuba, quiero que les cuentes.
Y si vas al Cobre, quiero que me traigas, una virgencita de la Caridad.
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