Por Lucy Ramón.
Cuando se logran vencer los once mil obstaculos que se atraviesan en el camino de la salida de Cuba, lo único que se quiere, es ver despegar el avion o la balsa, conforme van pasando los dias se nos va metiendo un bichito raro por el cuerpo y de repente, te das cuenta que estas extrañando a la familia, a los amigos, a los vecinos. Te insertas en la voragine capitalista y ya todo cambia, ahora solo hablas de renta, de seguros, como hacer los cheques, pagar los billes y de como no perderte para llegar al trabajo o a casa de algun amigo que te invito a un ''barbikiu''.
Cuando se logran vencer los once mil obstaculos que se atraviesan en el camino de la salida de Cuba, lo único que se quiere, es ver despegar el avion o la balsa, conforme van pasando los dias se nos va metiendo un bichito raro por el cuerpo y de repente, te das cuenta que estas extrañando a la familia, a los amigos, a los vecinos. Te insertas en la voragine capitalista y ya todo cambia, ahora solo hablas de renta, de seguros, como hacer los cheques, pagar los billes y de como no perderte para llegar al trabajo o a casa de algun amigo que te invito a un ''barbikiu''.
Cuando menos lo esperas, estas mas enredado que un carretel de hilo pero allá, en tu subconsciente hay una palabra que se asoma destellando luces de colores: Cuba, relampaguea y vuelve insistentemente, Cuba, Cuba, Cuba. En estos primeros tiempos del renacer en libertad, donde todo es una novedad, aprendes que existe y funciona dar las gracias, que aqui seras un señor(a) y que los demas dejaron de ser ''compañeros'' y tu también.
A veces la nostalgia no te deja ver el auto con el soñaste toda tu vida; la casa de tus sueños puede estar en cualquier parte, ya habra tiempo y oportunidad de tenerla; si vas al supemercado compras hasta lo que no te vas a comer y crees que hay que acaparar porque en cualquier momento se acaba. Cuando se vacían los plásticos de las sodas, del detergente y el ''condichion'' tu primera intencion es guardarlos. ¡Allá en Cuba esto es oro!, en solo dias ''montaste'' tu apartamento con las ''recogidas de la calle'', tienes un tv que te regalaron, un ''video'' que al que llamas ''viciar" para ir haciendote el americano. Llamar a Cuba es una religión, tu unico consuelo, quieres que te mantengan informado de todo lo que sucede en el barrio y como arte de magia tu discurso va tomando otros matices.
Los primeros dias todo era una maravilla pero poco a poco, les vas dejando saber a los de ''allá'' que aqui ''no es facil'', que los dólares no caen sacudiendo la mata, que no se piensen que estas viviendo la dulce vida. ¿Que comes bien? Si, es cierto pero la comida esta cara, que se paga hasta la sonrisa y que estas haciendo ''agua y carbon'' para ver como te las inventas para mantenerte aca, mandar los paqueticos a la familia y dar el viajecito del ''ritual''.
Los dias pasan, los años tambien y gracias al income tax y a las tarjetas, logras levantar un credito y entonces se produce el milagro del ''EL REGRESO''. Las tripas suenan, las manos te tiemblan, quieres que el ''gusano'' no pese tanto pues si te pasas de las libras, ahí mismo comienza la odisea y a tirar pa'lante el billete. Los nervios se disparan cuando aterrizas, ahora todo lo que antes era una rutina, se convierte en novedad, en algo raro. Los guardias del aeropuerto te miran con tremenda carota, están entrenados para recordarte que tu libertad se acabo y que regresas al infierno. Los que estan cansados de hacer el papel de malos y de tontos, se te acerca y te piden que los ''mojes" con algo disimuladamente pues tienen a los muchachos descalzos.
Rápido haces una maniobra y les pasas un dolarito de a cinco, no porque quieres darselo sino para que no te ataquen el bolsillo cuando pases por la pesa, ¡sorpresa!, los mismos guardias que te mendigaron momentos antes, se hacen los serios y te fajan ahora ''legalmente'' y a llorar que se cayo el tete.
Te cobran hasta las onzas por equipaje, ¡no cambian estos comunistas!, el recibimiento es lindo e intenso, todos lloran y se abrazan. Llegas a casa y te sientes estrecho, aprisionado, tu familia es ahora el centro de la atencion de la cuadra, la gente comenta.
Llego fulanito(a) y trajo tres gusanos, ¡que cosa! ¿por qué la hermana de ''Juaniquita'' trajo cinco la semana pasada y este se aparece con tres solamente? ¿estará ''palmao''?. Como no hay nada que hacer, la gente se la pasa en la esquina y en la puerta pendiente a todo, no hay trabajo, no hay sueños, no hay futuro. Ahora lo importante es que regresaste, miras tu casa, te resulta mas vieja, las paredes raras y los olores se confunden, todo gira a tu alrededor, eres el dios de los tuyos. Van llegando familias que te dicen que te quieren como un hijo y tu sabes bien que antes de irte eras para ellos un extraño o la ''oveja negra'' pero esos ''parientes amorosos'' tienen la cara dura y se quedan a ver que ''se les pega''.
Los muy sinverguenzas siempre se van con alguna cosita, repartes la pacotilla en la madrugada cuando los intrusos se fueron y a esa hora notas las caras, unos estan felices y conformes con sus regalos y te agradecen, mientras otros miran con recelo, siempre quieren mas o les gusto lo que le regalaste a tu tía, a tu mama o a tu suegro. Allá por cualquier boberia se forma la grande, mientras estan en la repartidera, escuchas a tu mamá pidiendote un regalito para el medico de la familia, otro para el que le consigue la leche en polvo, la pobre no quiere nada para ella.
Te percatas de que la vecina que le presta el telefono quiere lo suyo, el que le resuelve la medicina a tu abuela, está esperando lo suyo, el que cuido a tu abuelo en el hospital cuando estuvo enfermo, quiere lo suyo. En fin,en ese momento descubres que tu familia tiene deudas de gratitud con medio pueblo y que estaban esperando por ti para ''liquidar''. No hayas que hacer, no contabas con esos ''detalles'' y terminas repartiendo para esos acreedores fosforeras, blumeres, pellisquitos del pelo. ¡Gracias pulguera!. Sales a la calle y todos te saludan; hay quienes no van de ''presentados'' para que nadie diga que te fue a saludar por ''interes'', si le tiras un par de dollares para un jabon o la botellita de aceite, no les vendrian mal tampoco y agarran.
Los viejos que te vieron nacer,estan felices de verte y te recuerdan las maldades y travesuras que les hacias cuando eras niño, de cuando te fajaste con el hijo de Cacha y ella salio con la cutara y repartio para los dos peleadores y no paso nada. Para entonces ni los vecinos ni la familia se disgustaban por las peleas de los muchachos. Comienzas a buscar en la acera de tu casa las marcas de la ''Pelegrina''y llegan a tu mente aquellos dias de cuando se ''iba'' la luz y los muchachos del barrio se ponian a jugar ''La Cinta'',''La rueda-rueda'', al ''El escondido'', echaban apuestas de carreras en medio de la calle, descalzos y sin camisa, con un short roto.
Nadie se enfermaba tanto, los microbios de esos tiempos eran bobos, uno se bañaba en el aguacero o se escapaba pa'l rio o se banaba en el mar y no habia peligro alguno. ¡Que lindo todo!, lo malo es cuando te llegan los recuerdos amargos, esos mas recientes, de cuando se ''rompio el encanto'' y aun casado(a) seguias viviendo en la misma casa con tus abuelos, tus padres, hermanos, cuñados, sobrinos, tus hijos y cada uno resolvia su casquito de jabon o dos deditos de aceite para cocinar y se discutian el baño, el tv y el pedacito de pan. De cuando te llevaron para la estacion aquel dia que tu hijo no tenia leche y empezaste a decir que ''aquello era una porqueria''. Ese dia supiste que no eras libre nada, que no tenias la mas minima posibilidad de salir de ese hacinamiento a menos que te llegara el bombo o te tiraras al mar.
Por eso cuando en el 94' abrieron, no lo pensaste dos veces y te lanzaste con to' y muchacho a lo que
sea. Hoy estas de ''regreso'' después de años de espera., porque ser balsero del 94'es un estigma, eres un balsero, digamos, mas balsero que los demas balseros. ¡Que cosa!, que en Cuba cuando se les antoja hacerle la vida un yogurt a alguien, te acaban. Pero bueno, estas de regreso a casa, tu casa, ese caparazon mitad madera y mitad mamposteria que te vio nacer, que te vio gatear y escucho balbucear tus primeras palabras y dar tus primeros pasos; estas en tu casa buena, la que no paga renta, solo cobra recuerdos. Miras su techo, sus ventanas gastadas por el tiempo y notas que a la puerta ya le salieron arrugas y se le cayeron los dientes pero esa si es tu casa, la única, la que te resguarda de verdad. La de acá, es una casa prestada, ajena, como ajena es la libertad de que disfrutas por estas tierras.
Tu antigua casa es la Leonor, de ''La muñeca negra'' de La Edad de Oro. La casa de acá, la nueva, la linda, la del garaje y el jardín, se la debes al banco, tu sabes que no es tuya, ni lo será nunca porque no esta en tu tierra y el dia que no la pagues, también se rompera ''otro encanto''. Siguen llegando los amigos y sigues sacando de donde casi no hay, algunos regalitos. Te asomas a la puerta y miras a lo lejos a los chivaticos del barrio, ellos tambien te miran con rabia, están empercudidos, envejecidos, vestidos con ropitas remendadas y flaaaacos. Pensar que tu ahora tienes dollares y ellos siguen en la misma miseria de siempre.
Ahí en la esquina estan reunidos, los mismos que te velaban y te echaban pa'lante con el jefe del sector, cuando vendias lo que apareciera o recogias ''bolita'' para sobrevivir despues que te botaron de la escuela donde trabajabas de maestro porque ''las escuelas son de los revolucionarios'' 'y ya tu no lo eras. Ellos no quieren ni que los saludes porque piensan que ''eso'' se pega y estan condenados a morir con la revolucion pues si desertan, los ''cocinan'' todos los que por su chivateria fueron a parar a la prisión. Pero esos tracatanes estan nerviosos, se les nota su miedo por encima de sus harapos remendados; saben que les queda poco y reconocen que fue un discurso quien los convirtio en enemigos de sus hermanos pero ya es tarde.
A ti ya te da lo mismo, tuviste que irte de Cuba para aprender a perdonarlos; los que no los van a perdonar son los que viven allí, que estan esperando la ''hecatombe'' en cualquier momento. Tu familia está que no cabe de la alegría, finalmente les cayo la ''buena'' y por unos dias seran la envidia de todos, tus sobrinos especulando con los tenis y los juguetes delante de la gente y tu te encargas, sin proponértelo, de humillar con tus joyas y tus ropas de marcas a los que un dia estuvieron por encima tuyo y ahora el ''maceta'' eres tu. La competencia entre los vecinos es asquerosa, viven el pedacito de quien recibe mas y tiene mejor casa o hizo la fiesta de quince mas despampanante, gracias a los dólares del que esta fuera. Hablar por el celular en medio de la calle es una meta en Cuba; lo mas triste, es que quienes alimentan esas ''especulaciones'' y esas fantasias son los mismos cubanos que se revientan en una factoria para que su familia de alla no se ''quede por debajo'' de los demás.
Allá si que no se esta pensando en como luchar por el respeto a los Derechos Universales, ¡ni locos!, allá lo que se habla es de callar y esperar a que te reclamen y de no ''marcarse''. Los que van hablan de viajes, de casas lindas, de carros del año pero de LIBERTAD, de presos políticos, de organizarse para cambiar la realidad, de eso no se habla. Una jovencita se te acerca con una licra pegadita y un baja y chupa, muy exotica la nena ¿quien será?
- ¿No te acuerdas de mi? yo soy Yamile, la nieta de Cacha
-¡Oh dios no te reconocía! Cuando me fui hace dieciocho años eras una bebita y ahora mira, que rápido se fue el tiempo.
- Bueno, ya sabes ¿no te han dicho? yo estoy en la ''lucha'', lo hago por necesidad, mi abuela está enferma y lo que gana mi mama no alcanza, no tengas pena, si quieres salimos y me das algo.
Ese dialogo es muy comun en la Cuba de hoy, las jovencitas estan en ''su lucha'', pero a ti si te importa tu vieja vecina y vas hasta alla le das ''algo'' y le pides a su nieta que no te proponga prostituirse contigo y con delicadeza la evades. Pasaste la ''primera prueba de fuego'', por primera vez puedes entrar y hospedarte en los hoteles y playas a los que ''antes'' no te podias ni acercar a pesar de que Nicolas Guillen decia que ''tenias lo que tenias que tener''. Ahora eres un ''yuma'' como otro cualquiera y hay que rendirte. ¡Que rico se siente uno!. Antes de irte eras un extraño en tu tierra, ahora, ahora todo cambio: eres ciudadano cubano.
Te levantas cada dia con una hoja de ruta diferente, visitas amigos, pagas tu promesa a tu santo, llevas
flores a tus muertos y la llegada se celebra desde que llegas hasta el mismo dia de la partida. Hay lagrimas, hay abrazos, ¿Cuando vuelves? esa es la pregunta que no puedes responder y para que la vieja no se ponga mas triste de lo que ya está, le dices con un guiño: - ¡El año que viene mamá!
Atrás quedaron la casa buena, las calles marcadas por tus pies descalzos, los viejos que quizás no encuentres, si logras regresar algun día los niños de la familia saben que se va ''Santa'' y le hacen mas ''encargos'' para la próxima ¡Quieres llevarte en un abrazo a todos!, quieres arrancar un pedacito de cada rincon de la casa buena y echartelos en el bolsillo. ¡Quien sabes cuando volverás . El avion grita y se desgarra echando humo y te agita y tu no quieres verle la cara a nadie, tu te quieres ir y quieres quedarte. Quieres quedarte y te quieres ir. Los dias volaron y quedaron mil cosas por decirse pero las mas importantes, esas si que las repetiste constantemente y no te cansaste de decirlas y las gritas ahora cuando vas subiendo la escalerilla del avion mientras tu mano se entumece de decir adiós.
¡LOS AMO! ¡TE AMO CUBA!
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